Tarea

Se le pusieron rojas hasta las orejas por el guiño y estaba seguro que el encargado de la tienda lo había notado. Orel, en ese momento, realmente se sentía en uno de esos momentos dignos de publicar en FML...

"De... cumpleaños" corrigió rápidamente, siguiéndolo, sin notar un leve puchero, apenas notando los audífonos.

Pensó en decir algo, pero se detuvo a sí mismo considerándolo ya inútil. Nadir era realmente persistente, prueba de lo que decían sus tíos, que las personas tercas usualmente obtenían lo que querían.

"Nadir, eres increíble" admitió con una pequeña sonrisa, aunque bajito, como para sí mismo.

Nadir era alguien, sin duda, peculiar.

Asintió, aunque algo incómodo por momentos. Respiró hondo y se contentó con sólo pensar en el paseo por el río. Eso era agradable, tenía que serlo...

"Pero, ¿podemos dejar esto en su casa antes? No me siento muy seguro cargando con él, menos si iremos al río... o ¿qué le parece mejor? ¿ir directo?"

Nadir seguro que no se daba cuenta de lo raro que se veía que lo llevara tomado de la mano, pero las personas que lo veían seguro que sí, incluso le pareció haber notado la risita de un par de niñas que los veían a lo lejos mientras trataban de ocultarse tras su helado.

Sólo atinó a ocultar su rostro tras su mano libre mientras sentía el calor abrumador de un sonrojo... Nadir le agradaba pero sentía que sólo le echaba más leña al fuego y le daba más y más motivos a los que ya creían que era gay.

Por eso, sólo le quedaba pedir silenciosamente que llegaran pronto al auto.

"Cómo guste"

No le molestaba la propuesta, sería agradable caminar cerca del lago un largo rato, relajarse, olvidarse un poco de la escuela, por que lo necesitaba de vez en cuando.

Fue al asiento del copiloto, subió al auto y cerró la puerta a su lado, mirando la caja con la tableta que Nadir había comprado para él, aun sintiéndose algo apenado y comprometido por ella. Pero no sabía qué más podía decir, o qué diría a sus padres después... ellos también eran algo raros cuando se trataba de recibir regalos.

"Gracias otra vez"

¿A los diseñadores?

"No... quiero decir, no creo que sea... de mucha ayuda" bajaba un poquito más la voz, algo apenado.

Eso era el trabajo de los modelos, ¿no? Realmente no sabía como funcionaba la cabeza de los diseñadores, pero no se creía buen material de inspiración, sobre todo porque era más bien tímido para las miradas, sentía que, de ser usado así, estaría escondiendo el rostro todo el tiempo.

"Seguro prefieren a alguien como usted, más llamativo"

Las palabras que usaba Nadir... realmente lo hacían sonrojar a veces. "Codiciado..."

Negó, con más ganas.

"No creo, soy bastante ordinario, no veo que puedan ver algo especial en alguien como yo que sea diferente a cualquier otro chico allí afuera, además, me sentiría terriblemente incómodo, no podía... no sé" negó de nuevo. "Simplemente no creo ser material de nada innovador, a menos que se pongan de moda los nerds"

Spoiler:

Se sonrojó un poco con… bueno, todo lo que decía Nadir. Realmente lo abochornaba, y en especial eso sobre los nerds. Porque si lo era y mucho.

"Pero… si soy. Es decir, usted mismo me vio como estaba por ese libro que no encontraba y la tarea y todas esas cosas…"

Se hizo más pequeño en su asiento y lo miró por le rabillo del ojo antes de volver la mirada al camino. Suspirando.

"Le agradezco que diga esas cosas, pero está bien, me agrada ser como soy… creo"

Asintió, agradeciendo la posibilidad de cambiar de tema, aunque ahora pensaba en qué clase de cosas podían hacer, además de simplemente pasear, caminar...

"El río se ve tranquilo..."

Sonrió al mirar por la ventana, pensando en que sólo bajaran debería llevar el regalo que le había hecho Nadir a la cajuela, pequeños detallitos que apuntaba en su cabeza para cuando salieran. También la pregunta de a qué hora sería bueno volver...

"¿Podemos quedarnos hasta que empiece a anochecer?" Quería ver las primeras estrellas antes de irse.

"Gracias... me gustaría ver las estrella aquí, al menos cuando empiecen a salir y... sé que puede que no sea muy diferente a como es en casa, pero nunca es lo mismo ver el atardecer entre casas que en una zona más despejada"

Sonrió un poco abochornado. Sus pensamientos eran quizás los de una colegiala enamorada.

"Es... mmm... creo que son cosas a las que pocas veces..." dejó de hablar unos segundos, tratando de acomodar las palabras en su cabeza antes de retomar la palabra. "No es algo en lo que usualmente piense, son cosas sencillas, pero lindas, que es normal que pasemos por alto... No parece muy importante ver este amanecer o el que sigue, pero... no sé, si uno lo piensa, perderse uno es perderse él único que será así"

Negó. Demasiado cursi.

Se rió con eso último, aunque con algo de pena de admitirlo. Era verdad, quizás sólo era eso, un romántico sin remedio.

"Jajaja, bueno, a las chicas les gusta eso, ¿no?" preguntó como una forma de consuelo para sí mismo "que un hombre pueda ser romántico"

Sonrió a eso último, aun si no podía decir que estuviera tan seguro como Nadir, pero era un hermoso deseo.

"Creo que es lo que todos queremos" su sonrisa se amplió al mirar el río. "Yo... supongo que trataría de hacer todo lo que estuviera en mis manos para lograrlo, mientras no la dañara a ella o a otros, vería una forma de demostrar que... no sé... que corresponderme valdría la pena. No dejaría que alguien que me ame sufra. No podría. Creo que, sobre todas las cosas, yo buscaría proteger ese corazón"

Negó con la cabeza. Él no podía ver el amor como una maldición... simplemente, no.

"Lo siento, no puedo pensar en el amor así."

El cielo pronto empezaría a teñirse de los más bonitos colores en el atardecer, vería los rosas, los naranjas, el violeta pálido tocando el celeste y, en algún momento, antes de que lo supiera, se volvería todo a negro.

"Aunque haya cosas que duelan... no creo que el amor propiamente sea el que las ocasiones. Quizás, por querer a alguien, podemos sufrir su sufrimiento, pero..."

No estaba del todo claro ni para él.

"Bueno, quizás es sólo lo que dicen" se desvió sonriendo "que lo digo porque nunca me he enamorado"

Lo miró con las cejas ligeramente alzadas en una pequeña sorpresa a la que le siguió una pequeña risa.

"Nadir... a veces habla como mi mamá"

Hizo un gesto con la mano para que no tomara en cuenta su comentario.

"No se preocupe por eso. Ahora mismo no estoy buscando una relación. Primero quiero conseguir un trabajo estable y terminar mis estudios. Papá cree que uno no puede empezar a salir con una chica si no tiene por lo menos con qué invitarla a salir y creo que tiene razón."