Secuestrado en el deber

"Mejor déjalo así"

Dijo terminando lo último de su plato.

"Preferiría que no lo frecuentaras y lo dejaras fuera de sus problemas. En menor o mayor medida, sé que algo inmiscuido estoy, pero preferiría que Mish no tuviera que... Hugo y Richelle son sus tíos, no quiero crearle más conflictos."

"No quiero exponerlo a más daño..."

Dejó el plato en la mesa, sólo mirando por un instante a la habitación de Mishka.

"Puedes venir cuando quieras, realmente, sólo... no esperes que él responda mucho, no pareces desagradarle, sólo no es como Adrian. Aunque en apariencia se vea como alguien tierno, y no digo que no lo sea, Mishka puede ser también muy rencoroso y no creo que quieras tener que lidiar con ese tipo de cosas después del lío al que parece que te metió mi hermano"

Suspiró, levantándose para ir por una botella de whisky y un par de vasos.

"¿Quieres un trago?"

Preguntó al volver a la mesa mientras servía su copa.

"Me agradas... tampoco quiero que tengas más problemas"

"Tampoco te emociones"

Frunció el ceño mientras decía eso, haciendo su voz un poco más dura, pero suavizando apenas un poco su expresión después, dando mostrando una pequeña sonrisa ladeada y casi cómplice a ese hombre al tiempo que daba un pequeño trago a su bebida.

Tenían más en común de lo que iba a admitir, o de lo que iba a hacerle saber a Nadir, si ni sus hermanos lo sabían realmente.

"Ahora que están en la misma ciudad, ¿cuál es tu plan?"

"¿De verdad estás aquí sólo por trabajo?"

No podía culparlo por dudar... o sí, es decir, técnicamente nunca habían admitido nada de la posible relación que tenían Nadir y su hermano. Quizás no tenía nada que admitirse y sólo era dudosa porque ellos eran... bastante peculiares, por decir lo menos.

"Seré directo, ¿cuál es realmente tu relación con Hugo?"

"Por favor, Nadir"

Su tono sonó exasperado por momentos. Odiaba las respuestas evasivas.

"Ambos somos adultos, y creo que puedes muy bien contestar una pregunta como es debido. Lo que piensa Richelle que son... ¿es verdad o no? Yo podría interceder por ti si sólo estamos siendo paranoicos, pero si ni tú ni Hugo hablan, sólo dejan a pensar lo peor"

Lo peor... vaya forma de ponerlo.

Chistó los dientes, apretando un tanto más la copa en su mano mientras desviaba ligeramente la mirada antes de volverla al menor.

"Sabes lo que quiero decir..."

"Escándalos... creo que eso es lo último que me preocupa"

Frunció el ceño al sentir que básicamente, nadir le estaba de hecho confirmando aquello, no como suposición, sino que realmente lo pensaba y sentía.

"¿Tanto lo quieres en tu vida como para aceptar a una familia que no hace más que fastidiarte?"

Y se refería a ellos, y no es que le alabara la acción, sino que realmente sentía curiosidad, cualquiera fuera la relación que tuvieran ellos dos, muchos otros y otras, por menos se hubiera apartado de su hermano menor. Richelle la había tenido fácil. Nadir no... ni creía que lo fuera a tener.

"Eres masoquista"

Musitó en respuesta, terminando su bebida.

¿Y quién era él para decirlo? Si el mejor que nadie entendía que cuando se ama a una persona, sin importar si se tiene la certeza de un horrible dolor futuro, uno no puede simplemente apartarse del ser que ama. Oh, bien, ahora lo estaba poniendo en los mismos términos de amor que él conocía.

Seguro Xaver podía ser más imparcial, más objetivo... Aunque él quisiera, seguía inclinándose a uno y otro lado de la balanza sin poder compensarla antes.

"Pero, ¿quién no lo es?"

"No debería serlo..."

Aunque qué otra forma había de conocer la felicidad plena si no se llegaba a conocer la tristeza también, ¿cómo podía uno saber que se está feliz si no se conoce el otro lado de la moneda? ¿cómo podría preciarse?

Se levantó de pronto para ir a buscar el teléfono, necesitaba hacer una llamada, mejor solucionar las cosas de una vez, odiaba que dejaran las cosas a medias y a escondidas. Así que marcó rápido el número que conocía de memoria y espero apenas un poco el timbre del teléfono al tiempo que advertía a Nadir no moverse de donde estaba.

"Yohann... pásame a tu papá"

"Hugo, ¿podríamos vernos hoy? Es algo importante... No, en tu casa no... Porque no... Sí, el centro comercial está bien. ¿A qué hora puedes?... Está bien, nos vemos allí"

Colgó para volver toda su atención a Nadir, pero no dijo mucho antes de volver a la mesa, sin sentarse, sólo para pararse detrás del más joven, dejando su mano en su hombro.

"Es mejor dejar las cosas claras de una buena vez"

"¿No quieres oír lo vaya a decir?"

Sus manos bajaron lentamente por los brazos del menor, casi como una caricia, mientras se inclinaba sutilmente hacia el frente para que su rostro quedara junto al oído del francés al tiempo que susurraba en él.

"Descuida... no es el único que podría complacerte"

Estaba teniendo problemas con un trabajo de la escuela, por lo que decidió salir para pedir ayuda, pero cuando abiró la puerta de su cuarto para ir con él mayor, vio con algo de confusión cómo se encontraba con él otro hombre, pero cuando vio al mayor alejarse como si nada decidió pasarlo por alto, acercándose para pedir ayuda.

Mostró el libro y señaló la actividad.

Era algo sobre investigar sobre otras culturas, escribir algunas palabras, las vestimentas clásicas y... comida. Lo cierto es que podía buscarlo en internet, pero le daba algo de pereza encender la computadora sólo para eso, porque seguro terminaría viendo los dvd de series de anime que le había pasado Yohann e ignorando su tarea.

Se movió al escuchar la puerta, notando a Mishka viéndolos, pero no tuvo problema para actuar con naturalidad, viendo lo que deseaba mostrarle.

"¿Necesitas ayuda?"

Esas cosas, esas tareas no eran precisamente su fuerte, de Adrian quizás sí, seguro que se emocionaría incluso haciéndola por él, pero no era el caso de Beltrán.

"En esto es más fácil que te ayude Nadir, él es francés después de todo".