Confrontación

Se detuvo por el solo hecho de avanzar hacía sólo que lo jalara así que decidió respirar hondo y quedarse quieto por unos segundo, lo tuco cerca para poder escuchar aquellas palabras, guardo silencio como haciendo una pauta para pensar aunque no había realmente necesidad porque lo sabia y le creía lo que decía que sentía por él, tampoco huía por lo que dijo Bel bueno tal vez en parte, pero sólo porque le recordaba pensamientos que ya había tenido.

-..No es por él...-, Contesto antes de volver a verlo. -Vamos a mi departamento.-, Era mejor hablar de eso al menos en un lugar menor transitado porque veía aquellas personas pasar y aunque no pasara comentarios aun así, era mejor que fuera en privado. -Prefiero que me lleves que ir en taxis.-, Dijo como si no le quedara otra opción.

Iba a preguntar, si no era por Érico, entonces, ¿por qué? Pero se limitó a asentir cuando le pidió que fueran a su departamento, aun cuando poco después hiciera ver como si fuera sólo porque no quería ir en taxi, sabía que no tenái que tratarse necesariamente sólo de eso.

Acarició con el pulgar el brazo que aún sostenía del menor antes de soltarlo suavemente, como si no quisiera dejarlo ir del todo, como si temiera que volviera a tratar de huir.

"Está bien... vamos, estoy estacionado por aquí..." respondió en voz baja, antes de dar un par de pasos hacia otra de las salidas, donde estaba su auto.

Sentía que sería un camino largo...

Espero que le soltara antes de seguirlo hacía donde le indicaba que estaba estacionado, bueno ya le había dicho que fuera a su departamento así que no había vuelta atrás, paso al ver el auto y no se preocupo mucho por seguir el paso ni siquiera vio intento de querer huir, abordo cuando la puerta fue abierta pasando a esperar que se movieran sin decir nada, no estaba enojado ni nada similar sólo estaba pensando.

Llegaron al estacionamiento en completo silencio, le abrió la puerta, como era su costumbre, y lo vio entrar sin decir nada aún. Cerró la puerta, se fue al lado del piloto, abrió su puerta, subió, cerró, se puso el cinturón de seguridad y llevó ambas manos al volantes antes de arrancar el auto...

Luego suspiró, sin mirar a Nadir, sólo al frente, pero sin avanzar.

"¿Ya no quieres verme?"

Lo miró cuando escuchó sus palabras. -Si fuera eso sólo te ignoraría.-, volvió su vista hacía enfrente. -Te quiero más que a nadie y te lo he dicho... También demostrado...-, Miraba los coches que se encontraban en fila delante de ellos guardando silencio, no menciono nada más por esos momentos como si esperara algo, pero antes de que el otro rompiera el silencio continuo. -Pero se que para tí es importante toda familia... Sabes que yo también me preocupo por ellos especialmente por tus hijos... Así que...-

Sí, Nadir se había encargado de hacerle saber de su cariño, de su amor si podía llamarlo así, tanto en forma verbal como en acciones, y era por eso que todo eso de, de pronto acceder al capricho de Érico y decidir que sólo tenía que dejar de toparse con él era tan difícil de aceptar para él.

Iba a preguntarle los porqués cuando volvió a escuchar su voz, como si pudiera darle la respuesta a la pregunta que no había hecho aún... Con Nadir, de cierta forma, las cosas siempre se sentían así, pero ahora, no estaba seguro de que esa fuera una respuesta que quisiera escuchar.

"Es importante..." admitió, pegando la frente al volante, soltando suavemente el aire contenido en sus pulmones, aunque el acto, por el momento, quizás, se llegó a sentir doloroso "Pero mis hijos ya están grandes, ya no son unos niños a los que tenga que proteger del mundo, y tampoco dependen aún por completo de mí o de Richelle..."

-Pero... Aun así lo que pase le dolerá y lo sabes...-, Le menciono mirándolo pasando a acariciar su cabellos apenas como un roce que se le deja a una mascota que abandonaras. -Es por eso que hasta ahora has seguido con Richelle y sabes que no te pediría que los dejes, nunca te exigiría nada...-, Menciono pasando a volver su vista hacía aquel estacionamiento. -Sólo deseo quitarte un peso de encima...-

"No es tan fácil..." sintió ese roce en su cabello y alzó la mirada a Nadir "por favor, no me hagas sentir que me estás dejando, aunque sea lo que estés intentando, aunque sea porque creas que es por mí bien..."

Suspiró y se sentó bien en su asiento, mirando al frente, desganado, como si una gran pesadez le abrumara ahora.

"Mejor... vamos a tu departamento..." decidió mientras ponía el auto en marcha para salir de ese estacionamiento y buscar dirigirse al lugar donde Nadir se estaba quedando.

No menciono más sólo le indico el camino, aunque casi seguro de que no era necesario que lo hiciera, dejo que el camino fuera así en completo silencio era mejor de esa forma le indico donde estacionarse cuando entraron al estacionamiento del edificio donde vivía aunque los espacio se marcaba con el numero de los departamentos ocupantes.

Continua en Dos caminos