Luciérnagas

"¿No es descortes que nos vayamos antes de que acabe la fiesta verdad?"

Se separo de pequeño gesto con una expresion preocupada

"No es mi intencion estropear vuestra relacion y dejarte en mal lugar con ella"

Estropear su relación con Zina... Sólo pudo suspirar a eso.

-No cambiaría mucho, en realidad... Tenemos nuestro, pasado, por decirlo de alguna manera. Ah, fuimos compañeros en la preparatoria, dudo que haya algo que pueda hacer ahora que cambie su percepción de mí.

Y vaya que la percepción que tenía Zina Faber sobre él no era de las mejores, pero tampoco la de él hacía ella. Se sabían ambos demasiadas cosas como para que lo fuera, pero... quizás eso mismo los hacía "cercanos" de cierta forma.

Aunque sólo pensarlo le daba escalofríos.

"¿Te da confianza si te acompaño o prefieres enfrentarlo solo?"

Inseguro de si su presencia seria mas un alivio o una molestia en la despedida entre el y la joven. Aunque Andrew tambien deberia mostrar sus respetos, despues de todo aunque no la conocia habia sido admitido como acompañante y seria una falta de consideracion marcharse sin mas

"Descuida... tan poco es tan malo usualmente"

Se encogió de hombros y buscó tomar su mano con la suya, sonriéndole.

"Además, lo correcto es que te presente, ¿no es verdad?"

Estrecho su mano mientras asentia, extrayendo valor del contacto. No iba a enfrentarse a un lobo, pero por alguna razon, no sabia explicar si producto de logica o puramente instintiva, las miradas y las respuestas humanas lo ponian en mas sobrealerta, tan dificil era esclarecer sus intenciones

Pero siguio a Alvah mientras se veia rodeado nuevamente por las luces y conversacion de la sala de fiestas, intentando no parecer un conejillo a punto de escapar por culaquier hueco que se le presentara

Estaba terminando de desearle a una pareja de empresarios que se divirtiera y agradeciendo sus felicitaciones cuando divisó a uno de sus compañeros de bachillerato, sonriendo con apenas una leve curvatura de sus labios al identificarlo.

"Alvah Reid... casi pensé que no vendrías" admitió la anfitriona acercándose el mayor de los rubios, notando después a su acompañante, que no parecía para nada habituado al ambiente."¿Acaban de llegar?"

Se detuvo frente a la anfitriona, notando su sonrisa, sabiendo que cuando la dirigía a él era porque algo tenía en mente, y no precisamente bueno.

-En realidad, estábamos por irnos -dijo con la misma facilidad que Zina había confesado su poca fe en su asistencia, y realmente, quizás tenía buenas razones para dudar, es decir, ya se estaba yendo igual-. Siempre es difícil hallarte libre en estos eventos, pero quise al menos interceptarte para desearte un feliz cumpleaños y presentarte a la persona que invité.

Su mirada se volvió de apenas disimulada incredulidad... ¿Realmente Alvah la creía del tipo que aceptaría esa pobre excusa?

"Y aún más difícil si no me buscas en absoluto" y no es que le interesara que Reid la buscara, pero que le fuera con excusas baratas...

Pasó su mirada del rubio más alto a la otra cabecita rubia de un chico de apariencia delicada, rasgos finos, cabello ligeramente largo. Si, definitivamente lo que esperaría de Alvah.

"Zina Faber" se presentó extendiendo su mano al menor, con ese tono político, amable pero no necesariamente cálido "Encantada de conocer al acompañante del escritor Reid"

"Andrew Payton...un placer señoria Faber..." se presento mientras tomaba la blanca mano femenina extendia hacia el "y le deseo tambien un feliz cumpleaños y que disfrute de unos estrenados nuevos años muy especiales..."

Su mirada se volvio algo avergonzada pero reunio firmeza ante aquella joven que parecia exudar un aire de poder que solo se podia asociar a los hombres de negocios

"Disculpe la descortesia, es una magnifica velada aunque no estoy acostumbrado a las reuniones sociales...a decir verdad, esta es la primera a la que asisto fuera del circulo obligado de las convocaciones universitarias. Pero aun habiendo permanecido poco tiempo es admirable como todo ha sido organizado y quiza en el futuro tengamos ocasion de volver a hablar..."

No iba a quitarle el merito a la preparacion de la fiesta incluso si el no era adepto a ellas. La musica, la decoracion, eran detalles para ser admirados, aun mas teniendo en cuenta la juventud de la anfitriona. Y por esa razon y despues de haber escuchado sus comentarios con Alvah estaba seguro que la chica era mucho mas que una cara preciosa y un porte elegante

No queria adelantarse pero tambien podia aventurarse que la palabra -peligrosa- estaba tambien tatuada en alguna parte de la psiquis de la joven mujer

Dio un firme apretón a la mano blanca que se le presentaba antes de soltarla suavemente, recibiendo palabras que acostumbraba oír más bien de los que llamaba simples aduladores, pero supuso que no estaba mal para alguien que apenas entraba al circulo de ese tipo de "reuniones sociales". La adulación, por desgracia (o por fortuna para algunos) podía llevar a la gente muy lejos, según su experiencia.

"Puede ser, si se mantiene en contacto con el joven Alvah, es seguro que escuche de mí de nuevo... En fin. No los entretengo. Gracias por venir y espero que pasen una buena velada." Levantó suavemente la bebida que había llevado en su otra mano, como en el ademan de un brindis "Feliz San Valentín, apropósito."

A veces Zina parecía lanzar sutiles... ¿indirectas? ¿amenazas? "si se mantiene en contacto", "es seguro que escuche de mí". Tenía modos de decir las cosas bastante peculiares.

-Tampoco te entretendremos más, parece que el resto de tus invitados te espera así que...Esperamos que te sigas pasando bien tu cumpleaños.

Instintivamente, puso sus manos en los hombros de Andrew para jalarlo ligeramente hacia él y lejos de la anfitriona.

-Los veo a ti y a Jaska el jueves -dijo un tanto más informal, antes de dar una suave seña a Andrew como indicarle que podían irse ahora.

La presion en sus hombros le proporciono seguridad y siguio a Alvah lejos de la anfitriona y sus invitados. Noto que mientras se apartaban habia contenido unos momentos el aliento y lo dejo escapar en forma de inaudible suspiro

"La vida hace los mas extraños compañeros de viaje...aun no puedo presumir de bien conocerte, pero lo que he visto me hace creer que tu y ella poseeis un caracter dispar al del otro..."

Quiza fuera por eso por lo que mantenian contacto, que habia algo oculto a la vista de los demas en su personalidad que los mantenia en relacion

-Sí... -admitió a unos pasos ya lejos de la anfitriona, aunque su mirada volvía de vez en vez al interior del salón que abandonaban-. De hecho, en bachiller solían sacarnos del salón por discutir en clases.

Tenían un largo historial, podía decir. Él había sido un estudiante modelo hasta entrar a la preparatoria y gran parte de sus primeros problemas con los profesores, había empezado porque cierta chica tenía una tremenda habilidad para sacarlo de sus casillas. Los maestros, esos años, habían dejado de "quererlo" como solían hacerlo... en cambio, se había hecho más amigo del prefecto y el director, después de eso, los veía mucho más seguido.

-Tenemos un amigo en común -aclaró, como para responder a la pregunta que no se había hecho en voz alta y que realmente esperaba, de cierta forma, no sería el primero en preguntarse porqué seguían frecuentándose cuando parecían no tolerarse mucho-. Cuando estamos los tres juntos es menos... como lo que viste.

"Como una especie de arbitro o moderador en negociaciones de tregua..." especulo con una amplia sonrisa divertida y melancolica a medidas iguales.

Por su parte siempre habia sido una criatura timida, de esas que parecen muñecas de ojos grandes, sus amistades habian sido contadas y la mayoria de ellas habian ido desapareciendo en la corriente del tiempo y el espacio, separandose para continuar sus propios sueños que en ocasiones les habian llevado a otras ciudades o incluso otros paises

Miro a su alrededor mientras habian dejado atras la fiesta pero nadie los habia interceptado o habia llamado la atencion hacia el

"¿No ha venido?...¿tampoco es muy amigo de reuniones sociales bulliciosas?"

-Algo así -admitió con una sonrisa.

Siguió la mirada del pequeño rubio, buscando a su amigo con la vista, pero sin tener mucha suerte, quizás estaba arreglando otras cosas, o llegaría más tarde.

-Al parecer no está por aquí, pero seguro ya aparecerá, o está encargándose de coordinar todo tras bambalinas. Jaska, mi amigo, trabaja para Zina, de hecho. Estoy casi seguro que él fue responsable de que todo lo que viste estuviera en su sitio, seguro también se encargó de que los músicos, la comida y las flores estuvieran a tiempo, él es realmente bueno para esas cosas, pero... -se encogió de hombros-, quizás se tomó unas horas para estar a solas con su novia, o para ver el partido de la Premier League.

Sonrió pensando que, en cualquiera de los dos casos, Zina estaría muy molesta porque Jaska llegara tarde, quizás porque Zina solía ser sorprendentemente puntual para todo y Jaska y él no... sobre todo él mismo no mucho últimamente.

-Pero te lo puedo presentar después, si quieres. Él te agradaría, creo.

"Me gustaria. Quiero conocer todo sobre ti. Hobbies, sueño, amigos...todo lo que quieras mostrarme o decirme..."

Al salir al bullicio exterior, lejos de la fiesta, pero reemplazandola por el ruido de autos, gente apresurada y el frio de la estacion, se le escapo una pequeña risa que loo hizo encogerse levemente, algo que aprovecho para apegarse mas juntos, casi abrazados

"Bueno, el futbol no es una de mis asignaturas fuertes...es una cuestion mas de memoria que de placer, debo confesar. Si me preguntas por una alineacion o el resultado de un partido concreto, guardo informacion en mi cerebro, pero desde un punto mas analitico que aficionado. La verdad envidio a quien le brillan los ojos al recordarlo...debe ser maravilloso compartir ese entusiasmo y calor a la espera del ultimo pitido del silbato..."

Su mirada estaba al frente, pero parecia retraerse al tiempo pasado

"Cuando era pequeño siempre estaba rodeado de ese calor, era uno de los pocos momentos en que todos los hombres del barrio donde naci se podian reunir y toda la sala parecia vibrar con su respiracion, como si las paredes tambien contuvieran el aliento, se emocionaran o desesperaran...era una creencia que tenia de niño, que los lugares donde tenian lugar el choque de emociones intensas conservaban un palpito en ellos que te hacia pensar que tambien estaban vivos...un hogar con la esencia de una familia, una iglesia con rezos de fieles, los edificios respiraban toda aquella corriente de sentimientos..."

Su sonrisa se hizo avergonzada

"¿Suena raro?"

Una sonrisa se le escapó de los labios cuando sintió al pequeño rubio acercándose más a él. Había frío, pero la cercanía le brindaba una instantánea calidez.

Se quitó el saco para pasárselo a Andrew por los hombros antes de abrazar suavemente su cintura mientras seguían caminando y escucha todo lo que tenía que decir. Le encantaba la suave voz del menor.

-No es tan raro... ahora que lo mencionas, la casa en la que solía Jaska cuando eramos más jóvenes, incluso la casa de Zina ahora, me parece que tienen justo eso. Ahora mismo, aunque en el hotel había una fiesta con mucha gente, no se compara a la sensación de esos dos lugares cuando estamos los tres. Sobre todo cuando hay partido -agregó contento.

Por un momento había recordado sus días de preparatoria, cuando todavía era de los chicos buenos del salón, apesar de que ya se juntaba con ese par, que de no ser porque en más de una ocasión terminaba por pasarles la tarea, quizás no hubieran pasado el año. Sabía que eran inteligentes, sólo que en ese entonces, eran terriblemente perezoso.

-Admito que tampoco soy un gran fanático del fútbol, lo veo porque ellos lo ven y ellos si son mucho más... devotos, digamos. Son del tipo que recuerda los nombres de los jugadores y, Jaska sobre todo, si lo dejas, te narraría un partido cual comentador de deportes.

Negó suavemente.

-¿Cómo son tus amigos?

“A mí me gustaría conservar buenos amigos de la infancia, pero la mayoría de ellos se me fueron perdiendo en el tiempo y no los volví a ver…no tengo una amplia variedad de amigos y no tengo mucho tiempo para encontrarme con ellos con frecuencia a causa de las clases, además ellos tienen carreras diferentes, y el trabajo que realizo llevando papeleo, para juntar ahorros y enviar a mis padres”

Se apretujo un poco más cuando el viento le soplo en la cara, Londres era especialmente gélido en aquellos meses, en que las horas nocturnas mezclaban el frio y las ligeras neblinas. Pero, pensó con apenada satisfacción, su cuerpo en el abrazo se sentía cálido y relajado sintiendo el ligero ritmo de respiración contra su costado, que lo acunaba en sus pasos

“Son…la verdad es que somos muy diferentes. Supongo que tiene que ver con mi aspecto, como algo delicado que han de cuidar, al principio eso termino en muchas peleas, pero después pensé que era su forma de preocuparse por mi”

-No puedo decir que lo culpo del todo... no de tratar de protegerte o preocuparse, quizás sí de dejar que el tiempo los separe.

Le dejó un beso en la frente y lo abrazó un poquito más cuando se apretujó contra él. Realmente, ¿quién podía culpar a alguien de querer proteger a un chico como Andrew? No es que le viera delicado, al punto de porcelana que puede quebrarse, después de todo, era un joven y parecía sano; pero si daba el aspecto de algo que no debía dañarse, que debía cuidarse.

-Lo de los empleos distintos lo entiendo un poco más... -sonrió sin tantas ganas ahora. Era algo que... le podía llegar a molestar, a poner celoso quizás-. Zina y Jaska trabajan en la misma empresa, así que pasan mucho más tiempo juntos del que yo podría pasar con ellos, también coinciden en muchas más cosas y, aunque podría decirse que sé que me aprecian a su modo, a veces simplemente no es lo mismo... Siempre todo parece más fácil cuando somos menores, cuando estamos en preparatoria.

Miró la acera y hasta donde pasaban todavía algunos carros, esperando ver a un taxi que pudiera llevarlos a su casa, donde no se sintiera tanto el frío, donde pudieran ponerse más cómodos.

-¿Qué clase de chico eras entonces?

"Lo cierto es que mi etapa de infancia y de adolescencia no difiere mucho de la actualidad. Siempre fui bastante callado y no muy adepto a los juegos deportivos, pero si recuerdo que me encantaba salir de excursion. El contacto con la naturaleza, desde pequeño me interesaba todo lo que tenia que ver con los ciclos vitales de cualquier criatura. Recogia pequeños pajaros y otros animales para cuidarlos y tambien me encantaba leer...podia pasarme horas delante de un libro cuando otros niños se entretenian en la television..."

Noto la aparicion del caracteristico vehiculo negro y extendio sus dedos. El auto paro y abrio la puerta para que entraran, suspirando al interior calido del taxi comparado con el viento mas gelido de temporada fria del exterior

"Al crecer, mi etapa de...digamos rebeldia...fue casi inexistente. Sabia cuanto se esforzaban mis padres por sacar adelante la familia y les hubiera pagado muy mal dandoles mas problemas de los que tenian. Quiza pueda enseñartelas alguna vez...donde mi memoria falla, si algo tengo en abundancia son fotografias..."

Alvah agradeció y dio rápidas indicaciones del lugar al que se dirigían para poder volver pronto toda su atención a Andrew. Imaginarlo menor tras algunos libros en la biblioteca o afuera observando toda clase de animales pequeños, debía haber sido realmente encantador.

-Me encantaría verlas, imagino que eran un niño realmente lindo entonces -de esos que de tan pálidos de piel terminaban con la piel ligeramente sonrojada cuando hacía mucho frío, como si incluso eso les quemara-. Entonces eras un buen estudiante, buen hijo y, además, guapo, un pequeño angelito rubio... realmente no entiendo a las personas y no dejas de sorprenderme.

Cada vez le parecía más increíble (y más lindo, de cierta forma) pensar que el menor no había tenido pareja entonces.

-Casi me gustaría que entre esas fotos hubiera una de la que no te orgullezcas, yo era realmente horrible, no de muy niño, pero sí en toda la adolescencia... hasta como los 16 o 17 empece a ser más... bueno, menos molesto a la vista. La pubertad no fue mi amiga.

"Hay muchas de las que no me enorgullezco. Además mi aspecto no era tan maravilloso como puede pensarse. Me hacia enojar muchas veces. Los otros niños se reían o se enfadaban por su propia ingenuidad cuando creían que era una chica. Y todas las madres tenían la costumbre de estrujarme o pellizcarme cuando me veían. Me hacia ser muy consciente de lo delicado que parecía y pase noches triste por ello..."

Se arrellano en el asiento y sus dedos se estiraron para cogerle la mano. Tenía una sonrisa abochornada

"Pero después fue acostumbrarme. Y tú…diciendo eso me hace pensar en la crisálida que se abrió y salió la mariposa. Sin parecer delicado físicamente, me hace pensar en algo precioso…”

Cogió la mano de Andrew, la puntita de los fríos dedos con el pulgar y la acercó a sus labios para dejar un beso en ellos.

-La gente siempre dirá cosas, en esos pequeños juicios perdemos mucho, pero yo no quiero perderme de nada, quiero saberlo todo, sentirlo todo, verlo todo...

Se acercó un poco más, lento, para darle la oportunidad a Andrew de retirarse si eso quería antes de depositar un beso en su mejilla y susurrar en secreto:

-Si me lo pides, me olvidaré de cualquier indicio aparente de fragilidad y te ayudaré a ti a olvidarte de eso también.

"Creo que es linda esa pizca de fragilidad..." se giro de modo que podian verse ambas de sus mejillas tan encarnadas la que habia recibido un beso como la que habia carecido de el. Cuando lo habia sentido aproximarse, alejarse habia sido la menor de sus intenciones. Estaban solos. Tecnicamente en el taxi y habia una tercera persona, pero con el conductor dirigiendo su atencion al trafico sentia como si nadie los observara

"Pero creo que hacerse fuerte en compañia de alguien es mejor...¿tu lo has pensado?...quiero decir antes, si conocias a alguien por quien pensaras que querias ser mas valiente o mas energico..."

Lo meditó un momento, mientras contemplaba esas lidas mejillas sonrojadas y los ojos de un azul tan hermoso que se asomaban sobre ellas. Más valiente o enérgico... No realmente y era extraño darse cuenta de eso. Que entre sus allegados nunca había... considerado eso, posiblemente porque ellos lo era demasiado y él se conformaba en ese sentido.

Negó.

-Han sido otras cosas, creo -admitió, el mismo sintiéndose un poco apenado con eso-. Y la persona en que más exigió de mí... más bien alimentaba mis puntos débiles.

Bajó la mirada. No era algo de lo que quisiera hablar precisamente en ese momento.

-En cierta forma, sí, ha habido momento en los que he deseado ser más de algo por alguien, ahora mismo, deseo ser más como lo que hayas imaginado como tu compañero ideal. Más de lo que sera que te haga feliz.