Charcos

"Oh, pues, como el evento estará toda una semana, lo más probable es que hagamos una o dos presentaciones diarias. Quizás tu representante también quiera vernos. ¿Es de aquí? ¿Tiene hijos o sobrinitos? Si sí, debería llevarlos, las obras son como para niños y jóvenes, así que aunque no sea para que nos vea necesariamente a nosotros, puede ir para que sus niños nos vean"

Golpeó de nuevo el disco, con algo más de fuerza, esta vez apuntando directamente a la portería ajena, esperando anotar.

"Sí, eso estaría genial, entre más vayan es mejor, sobre todo su podemos... recolectar algo para los chicos, a veces las personas se animan a donar algo a la iglesia después de esos eventos"

Hizo un puchero viendo el marcador, eso de ir empatados... bueno, no es que fuera muy competitiva y la verdad cuando el juego iba cerrado era mucho más divertido, pero igual, hacer caritas era parte de la diversión.

"Awww, me harás quedar mal, apenas vienes a estos juegos y ya me ganarás. ¿Qué van a decir mis amigos de mí?"

“Oh, será divertido, eso te lo aseguro” comentó con una sonrisa, tratando de no perder la vista del disco, aunque apenas escuchó lo de suerte de principiante, vio el disco ir hacía su portería y, aunque reaccionó a él tratando de desviarlo, la rapidez con la que iba no le permitió mucho, y al final entró.

“Muuucha suerte al parecer” dijo con un pequeño puchero antes de sonreír para tomar de nuevo el disco, golpeándolo de modo que revotara a los lados de la mesa, rápido, pero consciente de que probablemente Nadir podría devolvérsela las primeras veces.

La cosa era si podía hacerlo convencerse de ese movimiento continuo para poder fintearlo cuando lanzara el disco en linea recta a la porteria contraria.

Soltó un gritito cuando vio que e regresó el disco y sólo pudo pararlo, más que devolverlo. Si era suerte lo de Nadir, realmente la envidiaba.

"Uh, no, habrá otro grupo de teatro" admitió volviendo a golpear el disco, siguiéndolo con a mirada. "Creo que ellos llevaran varias obras, pero estaremos en diferentes horarios"

“Uy, ¡pregunta con trampa!”

Advirtió luego de golpear el disco de vuelta al mayor, aunque esta vez lo había hecho de forma más distraída.

“Bueno, a mí me agradaban, son buenos chicos, pero no todos mis amigos piensan lo mismo. Creo que un par de ellos tienen un pasado juntos y no les fue tan bien, pero no estoy segura, eso me lo dijo otra persona y no sé si creerle mucho. Yo creo que sólo es que son algo competitivos, pero... Sí, bueno, no sé, a mí me caen bien”

"Pues, no, creo que no es tan intenso..." dijo devolviendo el disco, aunque más despacio, ahora pensativa con ese pequeño asunto. No estaba segura.

"Bueno, es que todos somos algo raros para esas cosas. Con que no se maten estaremos bien, creo"

"¡Awww! ¡pero eso sería muy feo!" se quejó y sin pensarlo apartó su deslizador de la mesa, donde sólo escuchó el ruidito del disco entrando, haciendo que alzara la vista al marcador. "¡Justo como eso!"

Había perdido miserablemente. Bueno, por un par de puntos, pero para ella eso era demasiado.

"Bu... bueno, será a la próxima. No sé tú pero yo tengo algo de hambre y una parada planeada, recuerde que aún tenemos un recorrido que terminar, de preferencia antes del anochecer"

"Ey, ¿qué pasa con esa mentalidad de asesino? Nada de muertes" advirtió como si estuviera hablándole a un menor, reprendiéndolo como si hubiera repetido frases indebidas de series de televisión o similares.

"¿Alguna vez has ido a comer al mercado de Soho? Esta... un poquito lejos de aquí, pero es muy bueno, mis amigos y yo vamos allí todo el tiempo, cuando no vamos a la taberna, que también es muy buena, los bocadillos son delicioso... mmm... no sé, ¿a cuál prefieres ir?"

Preguntaba mientras caminaba por la plaza.

"¿O quieres ver otras cosas aquí? No sé, tú dime~"

Hizo una pequeña mueca de disconformidad... Eso de que "lo más común" prefería tomarlo como una especie de broma, realmente ni siquiera lo pensaría como que estuviera hablando en serio, es decir, no por ser actores y eso tenían que estar tan locos como para tratar de matarse.

"Mmmh... pues ya dependería de cuánta hambre tengas, y si prefieres algo más tranquilo o algo un poco ruidoso..." buscó un reloj para ver la hora, al recordar también el día "de hecho, creo que en la taberna hoy es noche de karaoke... No sé, lo que tú quieras"

Ya iba a hacer puchero porque volviera a devolverle la pregunta, ¡así no se valía! Pero cuando al fin pareció decidirse, una sonrisa se le pintó en los labios.

"¡Entonces vamos a la taberna! Espero que estés con amigo de cantar, ve pensando en alguna canción porque si vamos a una noche de karaoke es pecado no subirse a cantar" Tomó la muñeca del chico para jalarlo, invitándolo a seguirla "vamos, vamos"

"¡Entonces perfecto!" canturreó contenta "te encantará el karaoke"

Salieron del lugar y Milliarde asintió a lo de tomar un taxi, acercándose a donde pasaban mejor los autos para hacer señal a un taxi en la lejanía para hacerle la parada.

"Ve pensando en una canción que te guste"

"Oh, lo será, te lo puedo asegurar, siempre se pone divertido"

Un taxi se detuvo frente a ellos, atendiendo la parada que había hecho Milliarde y no tardó en indicarle a Nadir que subiera con ella y entonces poder decirle al conductor dónde estaba la dichosa taberna en Barnes, aunque haciendo más bien referencia a cosas más llamativas que recordaba por los alrededores de ella para después poder ir guiándolo.

"Si escoges una canción conocida y cantas bien, la gente a veces te corea, y si les gusta mucho, el dueño te regala las bebidas de la noche... ah, porque a veces recolectan como... ¿propinas? Pero esas son para la taberna, es como, bueno, dicen que es para poder mantener el karaoke funcionando y poder invitar las bebidas después. Igual, a veces la gente se acerca y te da algo, pero eso es casi siempre cuando ya están borrachos, no es muy agradable, pero... ah, bueno, ya lo verás"

Asintió contenta, era cosa de ver. Y hablando de eso, notó como se acercaban ya a al taberna e hizo seña al taxista para parar, viendo que la cuota quedara saldada para entonces sí, salir ambos y tomar a Nadir de la muñeca para hacerlo entrar.

"Ven, creo que llegamos justo a tiempo para lo bueno"

Saludó a algunos conocidos, de las cuales unas parecían sorprendidas de la nueva adquisición de Milliarde, pero que parecían aprobar porque era guapo.

Tiró de Nadir hasta donde estaba el chico del karaoke, aunque había un par de jóvenes no tan jóvenes usándolo ahora, quería pedir lo más pronto posible el siguiente turno.

"Hey, lindura, mi amigo quiere una canción, ¿se la puedes poner?" preguntó con un guiño.

-Claro, linda, ¿cuál quieren?