Entonces...

Tomó la ropa entusiasmado, se sentía bastante contento .

- ¡Por supuesto! ¡Puedes dejarme la limpieza, puedo cocinar tambien! - Salió del cuarto brincoteando casi vistiendose en el camino - Me apresuraré en buscar un trabajo y... -chocó con la mesa que se tambaleó casi tirando un vaso, de no ser por que lo sostuvo en un reflejo instantaneo, se quedó quieto unos segundos antes de mirar a Derek como mascota regañada.
Quizá no robaría nada pero en sus pequeñas manos las cosas no parecían estar muy seguras.

Sonreía feliz con las reacciones del mejor, viéndolo brincoteando como feliz conejito.... y luego su cuerpo reaccionó a querer agarrar lo que había tirado al chocar, conteniendo el aliento por segundos en los que sintió que se le contraía el estómago...

No dijo nada al principio, dejó, sin quererlo, un pequeño silencio incómodo entre ambos hasta que vio esa carita de perrito regañado y sólo rió nerviosamente. ¿Era muy cruel pensar que el niño le recordaba una película de un San Bernardo? ¿Beethoven?

-Ah... ¿no quieres irte a dar un baño mientras te preparo algo?

Se mordió los labios sonriendo, sinceramente tenía un par de días sin un baño -decente por lo menos- por lo que la idea le fascinó al instante.


- ¿Puedo?

Acomodó sus cosas un poco más cerca del sillón, Se quitó su collar y lo puso cuidadosamente en la mesa que justo antes había golpeado. Sonrió un momento antes de mirar a Derek.

- No es necesario que me prepares algo, todavía tengo los tragos en el estomago. Pero si tomaré un baño.

Y bailoteó hasta el baño.

-Eso no es comida -regañó como lo haría una mamá, negando después con la cabeza, mostrándole el camino al baño-. Ahora te saco una toalla, y... luego ponemos tu ropa a lavar para que mañana puedas usarla.

Comentó dejándole todo a la mano, champú, jabón, acondicionador... y ya, ¿no?

-Voy a hacer el chocolate caliente que prometí.

Lucky asintió antes de entrar al baño y encerrarse. Tomó una no muy larga pero placentera ducha, vistiendose con la ropa prestada para dirigirse a la cocina mientras secaba su cabello con la toalla.
Un olor muy agradable llego hasta su nariz, más que el fresco aroma a limpio de recien bañado, era como un aroma dulce, como el de...

- Chocolate... - Dijo aún sacudiendo su cabello. - Que rico.

Sonrió al escuchar la voz del menor, llevado su vista a él antes de servir un par de tazas de chocolate caliente.

-Si quieres irte a sentar a la sala, ahora te lo llevo.

Buscó una pequeña bandeja para poner las dos tazas y algunas galletas y pan dulce, además de un par de lonches prensados, por si prefería algo salado y con proteína y se lo llevó todo a una mesita de café frente al sillón.

-Aquí está... ¿quieres ver algo en la tele?

El pequeño se deslizó alegremente por la cocina hasta el sillón, tomando su collar en el camino para ponerselo de nuevo.
Se sentó recogiendo las piernas mientras veía los bocadillos que el rubio dejaba en la mesita.

-Si, gracias. -Dijo ante la sugerencia de la T.V. mientras tomaba una galleta y un sandwich al no poder decidirse entre que probar primero. -¿Que vamos a ver?... ¡Oh, que ricas están!

Siguió mezclando dulce con salado, tomando de vez en cuando su chocolate, le hacía mucha falta comer algo, aunque no quisiera admitirlo.

-Mmmh... no sé, yo casi siempre veo caricaturas, o películas -para niños, por cierto-. Pero lo que tú quieras está bien.

Sonrió al verlo comer, sentándose a su lado para comer también, encontrando tiernamente encantador al menor. La gente agradecida le encantaba, porque dejaba con ganas de darle un poco más.

-Me alegra que te gusten, hay más, si te quedas con hambre. También hay otras cosas, puedes tomar lo que desees de la cocina.

-Pon algo de caricaturas entonces...¡Oh! Tal vez esten dando "los simpsons"...

Su barriga satisfecha lo hacía sentirse contento -si es que pudiera estar más contento de lo que ya estaba- pero conforme saboreaba sus últimos bocados la sensación de cansancio que había ignorado desde días anteriores lo dominó de golpe provocandole un largo y pesado bostezo.

Dejó la taza en la mesita y se frotó los ojos acomodando su espalda en el sillón.

- ¿a ti te... gustan "los simpsons"? -decía mientras se le cerraban los ojos.

-Jajaja, creo que está bien... veamos...

Se puso a cambiar los canales buscando alguno donde pudiera verse el programa descrito, hasta que notó bien el cansancio del menor, sonriendo cálidamente a él antes de dejar el control en la mesa, una vez encontrado el programa.

-Vuelvo en un segundo -comentó antes de ponerse de pie para ir a buscar una manta y una almohada a su cuarto y llegarla con él para dejársela al menor, entregando la almohada en sus manos, pero cubriéndolo él mismo con la manta antes de sentarse de nuevo-. Mejor así, si te quedas dormido, al menos estarás abrigado.

-Ese capitulo me gusta.

Lucky aprovechó el momento en que el rubio se paró para acomodarse de costado en el sillón, tomó la almohada abrazandose a ella en lo que era cubierto por la manta.

-Gracias, Derek. -Se recargó en la almohada entrecerrando los ojos- Mi mamá decía que me parecía a Bart, pero más tonto.

Bostezó de nuevo, pestañeando lentamente.

Había tratado de empezar a ver la televisión, pero escuchar la voz somnolienta del menor simplemente captaba mejor su atención que los dibujos animados y lo hacía sonreír casi de forma paternal sin querer.

-No me pareces la clase de chico que haga maldades... aunque luego de oír de tus experiencias con camioneros y tu conocimiento en licores, no sé qué tanto deba de fiarme -comentó con esa misma sonrisa y quizás un guiño, sólo para hacer evidente que estaba bromeando.

Le dejó el control y sólo le despeinó el cabello, volviéndose a levantar.

-Mejor te dejo dormir... ¿quieres que te despierte en la mañana o te despiertas solo?

Extendió los pies sobre el sillón para acurrucarse, aprovechando el espacio libre, le sonrió al hombre cerrando los ojos.

-No muy temprano- dijo con la voz algo pastosa y somnolienta mientras mantenía la sonrisa. - Gracias.

Y estiró la sabana cayendo profundamente al sueño.

No muy temprano... eso sería un pequeño problema considerando que él iba a trabajar muy temprano. igual, podía llamar a la su casa desde el trabajo y despertarlo así, además, se aseguraría que estuviera bien y le podría decir donde estaba la comida y esas cosas, o podía volver a la hora del almuerzo.

Ya pensaría en algún plan o cosa para hacer con su horario.

-Descansa -le deseó con voz baja al verlo quedarse cómodo, disponiéndose a ir a la propia habitación para poder dormir también.

Spoiler: