~Sueño~

-Mm, Deseas aprovecharte completamente de mi hermanito eh...-, Le dijo al mayor, aunque en realidad no parecía nada molesto con que lo hiciera, dejaba besos por la silueta de su hermano, jugando en saborear más de su piel, y no se limitaba mucho en realidad, era como conocerlo mucho mejor de lo que estaba haciendo en esos momentos.

Jadeo ante aquella duda, cerró su mirada, y agacho su cabeza de tal forma que sus cabellos cayera un poco sobre su rostro, cubriéndolo, y dejando apenas vista de sus sonrojadas mejillas. -....-, No deseaba decirlo, y sin embargo sentir cerca los dedos de su hermano dejo una pequeña caricias sobre ellos a verse reaccionar fuera de si y chuparlo, y estos apartaron como dejandole seguir. -...Aten..ciones...-

-¿Yo?... jamás…- comentaba de lo más irónico y divertido mientras seguía lamiendo el cuello ajeno, mirando ahora si al hermano gemelo ubicado detrás del menor, le sonrió de una forma intensa…

-El que está en posición para hacer eso… es otro…-

Sin embargo, aumentó la velocidad de la masturbación que iba orquestando entre las piernas de Yves, mordiendo su piel blanca a la altura del hombro, piel suave y sin macula en la que dejó un circulo rosado…

-¿No piensas complacer sus peticiones?- preguntó al mayor de los hermanos mientras volvía a sonreírle… -Debe estar ansioso…-

-Jaja en ambos suena eso tan descarado.-, Declaro, Delineo la vertebral de su gemelo a pasar su dedos por el centro de la espalda, y continuar el camino sin importar que ese sedero se terminara llegando a donde momentos atrás estuvo atendiendo de una forma más sutil. -Lo haré, no deseo ser tan malo con mi hermanito.-

Acaricio la entrada de su igual, y rozando ese anillo de carne lentamente dejando su contorno como un dibujo antes de hacer leve presión contra él a internar unos de sus dedos en su interior abriéndose paso de forma pausada.

-Uhmmm como si no te gustara lo descarado…-

Esperó sonriendo aquella acción por parte del gemelo, pero claro, mirando el rostro de Yves… quería notar los cambios en la tensión de sus cejas, en sus labios entreabiertos… esperó esa reacción disminuyendo las atenciones sobre la erección del chico… mordió su cuello de nuevo, lamiendo las marcas que sus dientes iban dejando ahí donde se posaban…

-Uhmmm ya veo que lo siente…- susurró al ver el rostro del chico cambiar un poco.

El placer fue demasiado severo para su cuerpo ante aquel intruso le hizo tensarse hasta el punto de casi correrse, y la sensación que quedaba a media le molestaba causando que moviera un poco su cadera en busca de más, sintiéndose un inmoral por aquellas reacciones de su cuerpo pero no pudiendo remediar tal situación que sólo brotaba de si.

Sus ojos soltaron pequeñas lagrimillas dejando ver su nublo, y entre ese escondite hecho por sus cabellos razonaba a ocultarse más tierno por unos momentos.

Buscó su oreja entre el cabello que caía en cascada delicadas, balanceándose sobre la barra a cada movimiento, había notado el movimiento de su cadera, que sin duda buscaba más atenciones, justo por ello es que sus movimientos sobre aquella erección se volvieron suaves, erráticos…

Mordisqueó el arco de la oreja blanca, suave… jadeó contra ella antes de lamer el lóbulo como si se tratara de un redondo dulce…

-¿Quieres más? Quizá algo más grande… Tu hermano te esta dejando con ganas… deberías pedirle que siga… que meta más…- hizo un par de movimientos rápidos con su mano masturbándole por unos segundos de forma rápida y constante antes de volver a detenerse para seguir lento… -O quizá a mi que lo haga más rápido…-

Era tan... No sabía el sentimiento en realidad, desvió el rostro a escuchar aquellas palabras, y no para ocultar su mirar, deseo saborear los labios del mayor, y cuando rozo contra lo que buscaba los besos, en una primera experiencia tímida a ser primero un leve contacto, pero luego se vio con un poco de confianza a pedir más de aquellos labios.

Sintió la entrada del menor contraerse provocando que buscara un nuevo acompañante al intruso de aquel interior, y así ampliar más aquella entrada que parecía hambrienta por atenciones, así que le brindo lo que buscaba, deslizando por ese lugar cálido de tal forma que parecía buscar.

Sintió el rozar de su mejilla mientras se giraba, y recibió contra sus labios la finura tímida de los ajenos, sonrió mientras le dejaba llevar un ritmo suave, apenas probando… para la segunda caricia estaba tomando algo de confianza, por lo que intensificó el beso, a la par de sus caricias.

Su lengua profanó aquella boca, después de lamer sus labios buscó a la ajena frotándose contra ella, primero apenas la punta, después con un poco más de demanda, notabas su cuerpo temblar, se lo imaginaba a causa de las atenciones que su gemelo tendría en otra parte de su cuerpo…

Ahogaba sus gemidos contra aquellos labios, sintiendo el temblar de los suyos propios, y saboreando aquella danza dulce que le estaba causando un calor agradable, ese estremecer que calentaba mucho más sus mejillas que se mostraban sonrojadas, suspiro, era agradable, y a la vez demasiado demandante, era como ir pendiendo energías, no podía realmente entender todo lo que estaba experimentado pero le gustaba.

El beso resultaba delicioso, aumentaba de intensidad, de demanda… su mano que sostenía aquella delicada barbilla acariciaba con la yema de sus dedos su mejilla, subiendo lo suficiente para tocar su lóbulo, presionarlo un poco mientras parecía querer comerse al menos a besos.

Su pulgar jugaba en la punta de su miembro dispersando aquel presemen que se dejaba sentir, caliente… seguía masturbándole, abarcando con su mano a veces todo el tronco del chico, acariciando cada cierto tiempo sus testículos suave, sintiéndolo temblar, endurecido y palpitante.

Miraba sobre los hombros de su hermano como se entretenía con el mayor, y al parecer de su pudor ya no quedaba mucho, verlo de esa forma tan abierta era entretenido, era conocer otra parte de su gemelo, de cierta forma eso le encantaba estaba el morbo de la similitud de sus cuerpo de esos deseos que podía tener por alguien igual que él.

Sus dedos se daban cuenta que la entrada del menor ya estaba dilatada, y había encontrado un buen lugar para moverse donde le hacía tener una reacción exquisita entre los espasmos del cuerpo, Así que sólo prolongo un poco más el acto inevitable

Acarició su cabello, encontrándolo más largo de lo que esperaba, delineándolo hasta donde caía el más largo de todos sus mechones, empezaba a parecerle incomodo el sitio, estaba en alto, por lo que para admirar era un sitio perfecto, pero para hacer algo más… la comodidad no estaba tan a la mano.

Sus caricias las distribuía entre su sexo y el pecho blanco, los puntos rosados duros al tacto que tiempo atrás habían sido acariciados por su hermano… rompió el beso lamiéndole de la boca hasta el mentón antes de echar un vistazo a la espalda del menor donde estaba su hermano.

-¿No prefieres un sitio más… suave?-

Sonrió a medio curva. -Me parece bien...-, En realidad su mente divago en unas cuntas cosas más, pero la propuesta venia bien así que podía aceptarlo por esos momentos, retiro los dedos del interior del menor, una delicioso sensación a se detenido ante su retirada, y dejo un cáliz agradable por su cuerpo ante el naciente calor. -Mm al parecer debemos atenderlo mucho más...-

Sonrió mientras soltaba lento el cuerpo ajeno, esperando muy poco la reacción de Yves, le gustase o no la idea, lo cierto es que igual no la tomarían del todo en cuenta a menos que fuera a favor de las propias.

Dio un último beso a su boca antes de separarse de él mirando divertido a su gemelo.

-Si?... que tal si me das algunas ideas?-

Tomó al chico en brazos cargándolo como si fuera una dama mientras lo llevaba hasta lo que bien podría ser un cuarto o una simple sala de estar, le dejó sobre un sitio suave, agradable y por mucho, más accesible para ellos, depositó el cuerpo desnudo ahí mirando de soslayo al que seguía vestido.

Lo siguió, viendo como su hermano parecía indefenso ante aquella posición, era como una dama en realidad, y cubrirle su cabello le daba una imagen mucho más débil a notarlo ocultar tal vez por pena o frió, no lo sabia que era una imagen muy distante a lo que conocía de él pero atrayente, vio aquel nuevo lugar donde estaban.

Se dejo llevar por el mayor sin reserva alguna, y cuando sintió esa comodidad abrió sus ojos no supo porque los cerro, pero sólo vio la nada por unos instante y ahora veía un nuevo lugar, y los dos que lo "torturaban" casi juntos.

-Jajaj pensé que usted seria el de las ideas.-, Se acerco al mayor, rozó su pecho, y su mano fue descendiendo lento. -Le diré que nuestro gatito desea algo de leche.-

Le sonrió al jovencito cuando notó que abría al fin los ojos, luego unas manos pequeñas, delgadas, parecidas en extremo a las otras se posaron en su pecho, el gemelo se acercó y lo permitió sonriendo para él…

-Habrá que darsela… ¿Quieres tener el honor?-

Preguntó deslizando su mano por el rostro ajeno, el era en apariencia el más atrevido de los hermanos, rozó con la yema de sus dedos los labios del chico dejando que sus manos siguieran el recorrido que habían iniciado mientras él abría los botones de la camisa ajena.

-Seguro que puede acogernos a los dos...-, Su mano llego a donde deseaba, dejando el roce sobre aquel bulto que escondía el pantalón. -Pareces necesitado también.-, No le importaba mucho mostrarse de aquella forma, la diversión lo era todo, y en ese caso lo era el placer, pero era jugar también con su gemelo a notarlo necesitado casi con una carita de suplica por atención.

Era un pensamiento travieso para venir de un adolescente, sonrió con cierta lascivia mientras daba un vistazo de nuevo al chico desnudo en la cama, podía escudarles sin duda…

Terminó de abrir la camisa del otro y fue ahora por el cinturón... soltó un jadeo ronco y agradable cuando aquella mano se paseo por su pantalón con total confianza…

-A los dos eh… espero le hayas preparado bien…-

Murmuró cerca de los labios del chico, dejándoles una caricia breve mientras le sacaba del todo el cinturón, abriendo el cierre del pantalón y acariciándole a su vez…

-Hm... Hice bien... mi tarea... Profesor...-, Dejo con una sonrisa traviesa, su personalidad era más diferente a su gemelo, su encanto estaba en ese sentido rebelde que a veces se podía mezclar con los gestos suave del menor, agrado aquella caricias, y era mejor dejar que la contienda quedar iguales, ayudo al mayor para que también se quedara en la misma condición que su gemelo, le ayudaría a despojarse de esa ultimas prenda sobre su cuerpo.

Se sintió como un morboso a ver a Iamin con el mayor, causándole un suspiro sin saber porque, y eso le hizo sentirse acalorarse por la pena de sus actos, y dios sabia porque más, ocultando su rostro.

-Buen niño…-

Murmuró con cierto aire autosuficiente, era una actitud completamente diferente en un rostro idéntico… le quito la ropa lentamente, dejando que le hiciera lo mismo a el, por el rabillo del ojo notó la mirada apenada del chico en la cama, y sonriendo se permitió el darle un espectáculo temporal… deslizó sus dedos por los hombros ajenos cuando le dejó resbalar la camisa, y por su espalda baja conforme el pantalón se enredaba en sus tobillos…

Paseó su nariz por el cuello ajeno lentamente, dejándole una mordida en el mismo mientras susurraba…

-Sólo mirar… no es divertido… vamos…- le abrazó caminando lentamente con él hasta la orilla de la cama, sentándose en ella y jalándolo a su lado…

Sonrió por las palabras sabia que era así, y que su hermano estaba un poquito desesperado por atenciones aunque no fuera así, pero, esa leve timidez era agradable para aceptarlo, acompaño al mayor hasta la cama, tomó un mechón del cabello de su gemelo, y lo acaricio antes de dejar que se ocultara en la espalda de este dejando una pequeña caricia por ella, el roce lento sobre la piel.

Dejó que acariciara a su hermano, mientras imitaba los movimientos con él, soltándole el cabello de la cinta que lo ataba, era tan largo como el otro, ahora apenas se notaba la diferencia entre ellos… le besó el hombro y la espalda lento, bajando hasta su cadera, besando…

Colocó su mano en la pierna de Yves, deslizando lenta la caricia hasta su muslo… y un poco más arriba hasta su sexo falto de atenciones, volvió a acariciar de forma lenta, impidiéndole perder al forma…

Sintió la acaricia de sus cabellos, y allí caída una identidad muy similar al de Yves tal vez siendo la única diferencia su forma de mirar al menos en lo físico, pero, en general todo era igual, en su personalidad no, pero en silencio de aquel acto tan atractivo, era simplemente difícil de notar, no, en realidad también había pequeñas diferencias.

Apoyó su cabeza contra el hombro de Iamin disfrutando de nuevo atenciones, su manos en un titubear decidió corromper un poco de lo que hacían esos dos por él, dejando tímidas caricias apenas surca los brazos que llegaba hasta él.

Dejó una mordida en la cadera del mayor de ellos mientras miraba el rostro del otro, medio oculto entre su propio cabello y el cuerpo de su hermano…

Se acomodó mejor en la cama, de tal forma que quedase cerca de Yves, acostándose de lado en la cama para besarle las piernas, los muslos… volvió a tomar el miembro del chico en su mano masajeándolo suavemente…

Suspiro calurosamente a sentirse de nuevo atención, pero, también eso hacia de nuevo bajar el calor que se había concentrado en el surco del camino hacia su bajo vientre, y le estaba provocando un desasosiego de emociones antes el punzar de su hombría, una de sus manos paso al cabello del mayor, enredando en ellos con fuerza sus dedos.

No quedo atrás, volvió a brindarle atenciones a su pequeño hermanito, le beso sus hombros, y surco hacia su cuello dejandole un mordida, haciendo que una marca rojiza se formara.