Bajo la manga.

Un café y un pastel, nada como disfrutar de una rica merienda después de un ocupado día cobrando las apuestas de los que habrían perdido contra él, esa noche habría partida de poker en el bar y necesitaba dinero para abrir la apuesta. No es que le obsesionara apostar, es que la adrenalina de no saber como podía resultar una partida le emocionaba, claro que bajo sus mangas tenía la salida perfecta cuando se hallaba acorralado.
Tenía muchas cosas en que pensar, y la merienda era la hora perfecta, tomó el periodico algo impaciente leyendo las noticias locales, buscó luego en avisos de ocasión.

-Quizá debería poner un anuncio- Se dijo a si mismo.

La mesera le dejó el café y el pastel en la mes, alejandose con una sonrisa coqueta que él no pudo ignorar. La vio alejarse frunciendo el ceño. Si supieran que "él" era "ella".

"No creo que le funcione mucho."

Declaro a pasar a su lado pues había prestado atención a esa voz que fue en un tono bajo el cual la mayoría hubiera ignorado como el chillar de un insecto, pero a contrarió de ellos se vio atraído a molestas o mejor dicho a conversar con dicha persona si se prestaba para la dinámica.

"Pero siempre se puede intentar igual el perder el tiempo es cosa del día."

-Bueno, soy alguien que gusta de perder un poco el tiempo. -Dijo la chica recargandose en su silla mirando al sujeto que estaba a su lado- Aunque creo que internet es mucho más efectivo que el periodico.

Dejó el papel a un lado y tras darle un sorbo a su café, volvió a ver al sujeto.

-No se quede ahí de pie, venga, sientese. La merienda sabe mejor acompañada de una amena charla. Por cierto, soy Becca ahm... Rebecca Kramer.

"Eso puede ser cierto, aunque en realidad todo varia según la forma en que sea utilizado si se sabe manejar todo sale perfecto aun con el medio mas primitivo."

Comento, se sentó cuando fue invitado escuchando aquel cambio en su forma de llamarse al parecer tenia forma de darse a conocer, lo declararía extraño si fuera otra persona, pero él sencillamente le daba igual si no tenía nombre.

"Gusto en conocerte, Me llamo Kaled y creo que más de disfrutar una merienda disfrutare de la vista si me permite decir es una persona atractiva."

Un ligero sonrojo se asomó por las mejillas de la chica, que si no fuera por el color claro de su piel no se habría notado. Estaba acostumbrada a escuchar ese tipo de cumplidos, pero normalmente provenían de las niñatas que le coqueteaban a ella pensando que era un "él" diciendo cosas de mocosas como "¡Que guapo estás!" y "Se mi novio", comentarios que en realidad ignoraba.
Pero nunca había escuchado un cumplido de un chico, por lo menos no cuando se veía ella tan varonil. Por lo que una parte de ella dio tiro a sus palabras prefiriendo ignorarlas, aunque a la otra le agradó el comentario.

-Gracias - dijo sonriendo para si cerrando los ojos algo incredula mientras daba un sorbo a su café. - Pero de buenas vistas mire por la ventana, el jardin es hermoso ¿no cree?

Observaba las facciones de aquel rostro notando aquel leve teñir, sonrió a ver ese gesto era interesante pues no había creído que eso sucediera, escuchó sobre el jardín, miró de reojo era hermoso lo sabía perfectamente pero aun así en esos momentos no tenía muchos deseo de admirar la belleza natural.

"Lo es, la belleza natura es algo sin igual. Aún así en estos momento prefiero admira la belleza que se presente enfrente mió, aunque debo aceptar que mi atracción es por un asunto diferente."

Abrió los ojos lentamente, con la cabeza baja mirando al chico por sobre su taza de café.

-Digame, por favor, que no es por dinero. - Dijo casi en suplica mientras sonreía algo ironica, preparandose mentalmente en caso de que tuviera que salir corriendo. Bueno, siempre pasaba: un par de apuestas, un par de victorias, y dinero estafado que luego le iban a reclamar. Esta vez dio un bocado a su pastel, por lo menos lo disfrutaría antes de salir corriendo. -No recuerdo haber jugado con usted.

La tipica frase que arrojaba aleatoriamente alegando falta de memoria. Aunque si bien esta vez era cierto.

"No es por ello y aunque fuera así me conformaría con una cita en forma de pago por tal asunto."

Comento como si no fuera nada en realidad sólo un comentario normal y era la realidad nunca se preocupaba por esos asuntos normalmente nunca caía en aquellas trampa, bueno cuando lo hacía normalmente era para averiguar otras cosas, pero no, en ese momento no tenia asuntos con esa joven de eso.

"Así que puede estar tranquila."

Becca sonrió dejando salir una carcajada bajita mientras se llevaba una mano a la cara apoyandose en ella.

-Bien, supongo que me siento más tranquilo ahora- dijo acomodandose en su silla un poco más relajada- Aunque he de admitir que la adrenalina de ser descubierto y huir no me desagrada demasiado...

Trató de darle otro sorbo a su café antes de poder preguntar las intenciones del caballero, de no ser porque su taza ya estaba vacía, alzó la mano llamando a la mesera quien de nuevo con esa sonrisa coqueta se acercó a su mesa.

-Me sirve otra taza, por favor. -Dijo Rebecca y miró al caballero- Pida lo que guste, Kaled, no es justo que este comiendo yo sola, yo invito.

"Cierto la persecución es divertida pero más cuando eres el cazador."

Sonrió, le gustaba andar de cacería siempre era entretenido cuando podías hacer de tus victimas algo divertido, la simple tortura de hacerlos temer por lo que pudiera hacerle cuando los alcanzaras era una invitación a desear seguir torturando su débil mente.

"No es necesario además no me sentiría bien con eso."

Comento antes de acerca a ella tomándola del mentón para alzar su rostro, aunque un acto que tal vez no debería hacer de todo en ese segundo, pero a él no le preocupaba ni un poco menos el hecho de encontrarse ya cerca de los labios ajenos.

"Pero puedo aceptar si después me permite recompensarla..."

Sonrió dejándola a separarse de ella y sentarse de nuevo bien, sólo había lamido sus labios apenas con la punta de su lengua, miró a la mesara diciéndole que deseaba.

Arqueó una ceja extrañada cuando el caballero la tomó del mentón, desde ahí el tiempo transcurrió demasiado lento para ella.
¿Lo haría? ¿Realmente lo haría?

La primera reacción al verlo acercarse fue mirar de reojo a la mesera, quien tenía la misma expresión sorprendida -si no es que más- de ella. Seguido miró a todos lados, y tras no encontrar otro escape cerró los ojos con fuerza.

Apenas si sintió el ligero roze y petrificó su cuerpo. Lo escuchó hablar y abrió de nuevo los ojos algo atonita.

La mesera sirvió el café y se fue tras asegurar no tardar con la nueva orden.
Permaneció en silencio unos segundos, mientras la incredibilidad la invadía interiormente, Rebecca entrecerró los ojos en una mezcla de burla y desprecio.

-¿Eres de los que no se atreven ni siquiera a besar a una chica?

"No lo hice por la sencilla razón de que no era mi objetivo."

Declaro de forma tranquila debido a que sólo se encontraba jugando en esos momento, sólo deseo saborear la reacción de aquella persona si era interesante continuaría y si no lo era sencillamente lo dejaría así era él, vio a la mesera regresa pasando a dejar lo que solicito.

"Pero si tanto deseo tienes de recibir un beso puedo dártelo a final nada me cuesta."

Un pastel de chocolate se presentaba ante él, el olor que desprendía era suave en un toque de vainilla, rociado de canela que hacía un granizado en aquella presentación.

Por un momento sintió como si le cayera un balde de agua fría, por lo que se encogió de hombros sutilmente, aunque luego se burló bajito mientras agarraba la cereza que adornaba su propia porción de pastel.

-Me caes bien- admitió con una sonrisa un poco cínica, mirando la cereza que sujetaba por el palito- Hablando contigo me siento en un juego de naipes.

Como si en su mano tuviera puros 2 y 3, que apostar sería demasiado riesgoso.

-Esta vez paso.

"Entonces he de sentirme halagado por ser parte de un juego tan interesante."

Comento con una sonrisa antes de corta un poco de su pastel y saborearlo, Exquisito, era la palabras mas cercana a la descripción de aquel postre no cabía duda que Kisho siempre daba la perfección con sus receta eso era algo que no se debía dar a a ligera.

-Soy una experta en ese tipo de juegos- Comentó con una sonrisa burlona- Simpre tengo algún as bajo la manga.

Comió el último bocado de su rebanada de pastel, limpiandose sutilmente con la servilleta la crema que quedó en sus labios.

- Delicioso, simplemente delicioso.

"Aun así no me fijaría siempre ha uno mas astuto que otros."

Comento con una sonrisa sin prisa en saborear su rebana de pastel, aceptaba la delicia del dulzor pues era lo que realmente atrapaba su atención, era algo normal en él pues se veía inducido en eso por Eliot aunque claro no comía tanto como este pero si estaba en cercanía.

"Lo son. es una parte esencial de la popularidad del lugar."

Sonrió casi por reflejo, esta vez concentrandose en su taza de café.

-Bueno, muchas veces no sólo se trata de astucia.

Bebió un poco, y tomó el periodico suspiró pesadamente tras recordar sus prioridades antes de volver a apostar, pero prefirió no amargarse la merienda y dejó todo a un lado, volviendo a mirar al chico.

-Habla como si conociera muy bien este lugar. ¿Viene muy seguido?

"concuerdo con eso."

Menciono antes de prestar atención a su pastel dejando que nuevamente su paladear saboreara esas exquisitas sensaciones que nacía de la complementación de ingrediente, miró a la joven ante aquella pregunta, sonrió.

"Si, Muy seguido, vengo a ver a alguien que luego anda por aquí."

Volvió a sonreír, esta vez agachando un poco la mirada.

-Oh, así que viene a ver a alguien- repitió en broma un tanto picara-... tal vez lo estoy enteteniendo.

Ahogó una risita en su garganta mientras jugaba con su taza de café.

"Tranquila no debe ponerse celosa en este momento solo tendré ojos para usted."

Declaro sin ningún problema en desviar el asunto hacía aquella que estaba sentada enfrente suyo, en ese momento estaba libre porque no estaba allí, pero bueno seguro que si estuviera ya se encontraría pegado a él así que podían están tranquilos por esos segundos.

Rebecca se mordió sutilmente el labio inferior con una sonrisa, al tiempo que curvaba una ceja en una expresión como de burla, era una mueca que acostumbraba hacer en sus juegos de azar.

-Eso me gusta. -Dijo - Normalmente no es de los chicos de quienes atraigo las miradas.

Se acomodó el pelo detrás de la oreja para luego recargarse en la mano.

-Bien, Kaled, ¿hay algo que te guste? ¿Algún pasatiempo? ¿Los juegos de azar?-Volvió a sonreír- Espero no te molete si te llamo de "tú"

Spoiler:

"Eso es porque algunos hombre son muy ciego como para poder encontrar la belleza de una perla que se oculta."

comento sencillamente pasando a mirar a aquella joven era como si estuviera midiendo sus reacciones, aunque claro siempre podía esperar mucho más, pero por el momento con lo que veía estaba bien, decidió contestar las dudas.

"Tengo muchos pasatiempos... No soy muy dado a los juegos de azar pero nunca rechazo entretenerme de esa forma si soy invitado.., Adelante puedes tomarte la confianza."

-Pues cuando gustes, suelo organizar algunas partidas de Texas, o Black Jack en el bar.

Se acercó un poco como quien confesara un secreto y con la mano cubriendo su boca murmuró:

-Por el momento no es del todo legal, pero es lo que lo vuelve divertido.

"Eso suena interesante me apuntare para la próxima."

Sonrió por unos segundos.

"Aunque sería mucho mas atractiva la apuesta si sobre la mesa estuviera tu."

Declaro como si la quisiera de premio o similar aunque nada que fuera realmente de creer, pero como notaba poco de aquel rostro buscaba ver su punto débil, no mejor dicho buscaba el mejor gesto en aquel rostro para entretenerse de una forma más sana.

Lo escuchó complaciente, en el fondo en realidad ansiaba algún día jugar con ese chico, los sujetos como él hacían los juegos interesantes.

Una risita escapó de sus labios al escuchar lo segundo, mientras cruzó por su mente "¿Estás bromeando, verdad?" pero en lugar de eso, volvió a morderse el labio.

-Si, bueno... Suelo apostar dinero, autos, incluso me han apostado viajes pero nunca apuesto sobre mi misma... Aunque podría hacerte una excepción.

No es como si hablara en serio, pero aún si lo hiciera, Becca tenía sus trucos para no perder.