Vision

Los pasos firmes retumbaban por las galerias del museo, buscaba alguna galeria especial, con luz y bellos acabados que al mismo tiempo le hiciera sentirse fuera de la epoca, la puesta de uno de los nuevos artistas que patrocinaba ameritaba una sala exquisita y las ultimas locaciones no parecian ser del gusto de aquel hombre. El tiempo que se tomara escogiendo las piezas y el orden adecuado al colocarlas para que el espectador a quien iba dirigido comprendiese lo que el veia, estaba por irse por un retrete si no encontraba el ambiente adecuado. A veces, solo a veces el tener un gusto tan detallado por el arte, el deseo de ser parte de todo el proceso era cansado, se recordaba a si mismo continuamente que si no era el quien llevaba acabo todos los detalles a tratar las cosas no saldrian como deberian y peor aun el artista quedaria en ridiculo. Eso lo animaba para cuidar cada detalle, el tiempo suficiente hasta que encontrara a alguien con los estandares que el exigia.

Buscar siempre un sitio adecuado para las exposiciones que organizaba era toda una labor, la simple vision de lo que el deseaba y la forma de resaltar las piezas de la coleccion requeria de un verdadero ojo critico y muchas de las salas del museo en Hampstead eran demasiado planas, cumpliendo al pie de la letra con los estandares adecuados para la conservacion de los articulos que exhibian. No eran adecuados para su propio ojo critico, quiza el solo hecho de improvisar una exposicion como la que deseaba por una sola noche iba esta vez demasiado lejos.

La figura esbelta de cabellos rubios y traje color beige se quedo en medio de lo que parecia un observatorio, los grandes cristales que cubrian el techo y formaban al mismo tiempo figuras de las constelaciones habia captado su atencion, la sala en si misma parecia estar completamente vacia; casi como si le hubiese estado esperando todo el tiempo, lista para cumplir con los estandares de rubio. Recorrio con lentitud hasta el ultimo rincon una vez se puso en movimiento, visualizando donde iria tal cuadrro, tal escultura, la mesa con las bebidas, los pequeños rincones listos como descansos para que los invitados comentaran las obras o el se diera el tiempo para intentar vender las piezas a cada una de las posibles victimas en turno la noche prometida. Los costos no serian problema, quiza para su contador el cual se desquiciaba al momento de cierre, los permisos por otro lado eran los posibles dolores de cabeza.

Su día era tranquilo y esperaba que continuara de esa forma, inicio con su preparación para ir a clases y presentar su examen en cual no duro más de dos horas concluyendo este tiempo paso a abandonar las instalaciones ya que no tenia más clases por ese día, sus caminos lo llevaron de vuelta hacia su casa para poder pasar a cambiarse y luego ir a Scarlet Oak Garden donde su turno iniciaría en el medio día.

No tardo en llegar a su trabajo paso a iniciar su turno hasta que se vio detenido por el encargado el cual le informo que debía ir al museo por algunos tríptico, era común que este le diera algunos para generar mayor publicidad hacia sus exposiciones, no dudo en aceptar para ir por dichos folletos, se retiro pasando yendo al museo el cual daba un cambio total como el recorrido que había dado, era un constante pues se notaba tranquilo aun cuando había paso de unas cuantas personas.

A llegar lo primeo que hizo es cuestionar por la oficina de información donde debía de pasar según le informaron, el guardia le explico el recorrido pero al momento de seguir aquellas indicaciones se dio cuenta que el paso no era tan fácil como se hacia ver aquellos espació, dio vuelta hacia otra sección del museo dando cuenta que en teoría ya debería estar donde debía llegar y notando que no era así sólo confirmaba que se equivoco, decidió volver sobre sus pasos para retomar el camino hacia otro pasillo desde donde se encontraba seguro de que era el camino que le indicaron.

Estaba detenido en un punto por unos segundos para ver que había dos pasillo más exceptuando el que tomo momentos atrás, suspiro pesadamente por ese lio antes de elegir uno pasando a ir por la derecha pero a arrepentirse iba a volver a sus pasos, pero antes de poder dar la vuelta choco contra alguien. -Disculpe...-, Fue lo primero que dijo tras das unos pasos hacia adelante para poder girarse y disculparse de una manera mas adecuada.

Un leve empujon lo saco del ensimismamiento bajo el que se encontraba al deleitarse con la galeria que era su proximo objetivo a conseguir. Los ojos verde se posaron en la figura esbelta de un joven de cabellos azulados, le miro indiferente dedicandole una sonrisa cortes y nada mas asintiendo con la cabeza ante la disculpa del mas joven, los rasgos aun juveniles que mantenian a esa persona entre la niñez y el cambio a la etapa adulta le hacia creer que no sobrepasaba los 18 años.

-No tengas cuidado, no has causado gran daño-

Se acomodo el cabello tras la oreja, mirandole con detenimiento, estudiando las finas lineas de ese rostro un tanto androgino, un perfecto juego de la naturaleza al brindarle esa piel blanquecina para aquellos peculiares ojos del color de la miel.

-Si me disculpas-

Una nueva reverencia y un giro fue todo cuanto hizo, con intencion de continuar con su pequeña inspeccion.

Agradeció que aquella persona haya personado su pequeña torpeza, pero no deseaba tomar más tiempo del que debía en llegar a esa oficina ya que debía de volver a su trabajo y aunque no se encontrara el dueño aun así le debía respecto al encargado por lo cual no planeaba abusar de su petición para hacer algunas otras cosas pues sería descortés.

Lo vio girarse ante su actitud se mostraba que estaba ocupado, decidió seguir sus pasos pues no le gustaba interrumpir a los demás en deberes, pero pensándolo mejor tal vez el sabia donde se encontraba el sitió donde debía de llegar y eso le ahorraría trabajo, se acerco de nuevo a él esperando no causarle mayores molestia con su dudas. -Disculpe, siento molestarlo, pero podía hacerle una consulta.-

Le observo detenidamente esta ocasion, girando el cuerpo por completo a modo de encararlo, suspiro ante la pregunta, quiza si tenia un poco de culpa al no estar acostumbrado a esa clase de contactos. El que de entre todas las personas lidiaba con adultos, hablar con un chico como aquel le parecia un tanto desconcertante.

-Dime, si puedo ser de ayuda para ti.-

Dejo inconclusa la frase, esperando aque aquel adolescente hiciera su peticion, dentro de los medios a su mano llevaria acabo la peticion, pero de salir con alguna de esas ocurrencias tipicas de los mocosos no dudaria en darse la vuelta y no ver atras en su intento de alejarse del puberto.

Le veia y no dejaba de observar los rasgos aun infantiles en aquel rostro juvenil preguntandose que imagen tendria el para el ajeno, la mirada del otro era la de una persona seria pero tenia aun sus dudas, en primer lugar que mocoso podria estar perdiendo el tiempo en un sitio como aquel?

Espero ver si aceptaba escucharlo o no, tampoco era como si lo fuera a obligar aun cuando sólo quisiera pedir una indicación, escuchó por fin su voz pasando a estar agradecido. -... ¿Sabe donde se encuentra la oficina central de información?, Me informaron que estaba en la planta alta, pero he perdido el rumbo.-, Le informo esperando que supiera cual era la dirección correcta para continuar hacía aquella oficina, esperaba que si supiera o tendría que buscar de nuevo por su cuenta hasta encontrarla o en su defecto a una nueva persona y seguro que cuando volviera el encargado no estaría feliz.

""Me ha confundido con una especie de guia por lo visto""

No cambio en lo mas minimo la expresion de su rostro y con una simple seña del menton, como si no se necesitara de mas, le indico que comenzara a seguirle en aquella zona del museo. El movimiento en aquellos pasos suaves y firmes se notaba en el cabello que ondulaba por la espalda del curador, extasiado con las obras que miraba de reojo al andar por aquellos pasillos que de nuevo le alejaban de su preciosa sala perfecta.


-¿Dime una cosa chaval, no has podido tu mismo ver el gran mapa que esta en la entrada junto a la recepcion?, ¿quiza pedir uno de esos tripticos con las debidas indicaciones?-


Se complicaban tanto las cosas los pequeños jovencitos. Era gracioso pensar que en realidad no era mucho mayor que el niño aquel que le pidiera ayuda.

Vio aquel movimiento le recordaba aquellas personas alzadas que en algún momento llegaba en el orfanato para encontrar algo de "calidad" entre los menos afortunados, eso le molestaba aunque bien podía ser que esa persona no fuera muy comunicativa, pero bueno a veces aun ello necesitaba hijos aun cuando fueran adoptados, sólo le siguió a paso lento aunque con que le hubiera dicho el camino era más que suficiente para él.

Aquella pregunta paso a atraer su atención, pero sin pensar en algo sobre el porque aquel comentario sólo correspondió a responder. -Aun cuando se crea que las indicaciones son claras no siempre son así, aun con un mapa o en esta ocasión un croquis no aplica a que será encontrado lo deseado, esos símbolos sólo son un punto de ayuda.-

-Espiritu indomable, no puede haber duda sobre ello, eh?-

Se detuvo un instante mirando aquel rostro sereno, no podia interpretar del todo el pensamiento del chico aquel y ese comentario de alguna manera indirecta llamaba su atencion, leia el espiritu del jovencito de una manera que no se podia describir.

-Se necesita ser demasiado despistado para no poder comprender del todo las indicaciones y es mas que suficiente el leer perfectamente los tripticos con las indicaciones para ubicarse.-

Ladeo un poco el rostro recorriendo mas detenidamente con la mirada aquellas facciones y el porte del jovencito.

-Son los chicos que no les agrada la lectura, quienes pueden darse el lujo de decir semejantes palabras.-

Le palmeo un hombro, recorriendolo ahora por completo con la vista al girar alrededor de ese chico, inspeccionando cada detalle de la fisonomia de este.

-¿No estas interesado en un trabajo temporal que pudiera darte?-

-Muy a contrarió a veces son las propias indicaciones lo que provoca que las personas se confunda, no todos tiene el mismo nivel de compresión, es por eso que se debe de tener más cuidado al momento de dar indicaciones.-, Sólo comento y no lo decía por defenderse, él sabia que era a veces malos con las indicaciones porque casi siempre las personas terminaba confundiéndolo por decir la dirección conforme ellos recordaba, lo cual causaba que omitiera cierto detalles o señalamientos que podían hacer diferencia.

Sintió aquel contacto simplemente no lo tomo de ninguna forma aunque no muy acostumbrado a ello, prefería evitar algunas muestras de afecto normalmente sólo se lo permitía con los niños y eso era porque con ellos no sentía ese peligro que dejaron remarcado en su ser, ante esa duda dicha decidió contesta. -Eso dependería del trabajo.-